Esclavo Eterno: Si los vampiros no fueran los verdaderos monstruos... (Un nuevo mito de Vampiros)

En un idílico paisaje francés, en tiempos de refinados caballeros y virtuosas damas, Annabelle Giraud, una joven inteligente, compasiva y de singular belleza, acepta casarse con el futuro conde de Montmoren, alguien muy lejano a su ideal, arrogante, de gustos ostentosos y actitud lasciva, para salvar de la expropiación el viñedo de su padre, asegurando el porvenir de la familia.
El día de su compromiso, Anna recibe de su prometido el más extravagante y macabro regalo, un esclavo vampiro llamado Viktor a quien François y los suyos han mantenido bajo su dominio por más de cincuenta años, haciéndolo pagar con trabajo y castigo por sus crímenes.
Pese a que su primera reacción es de temor, durante la ausencia del novio por un viaje para resolver asuntos de negocios antes de la boda, la muchacha irá conociendo al prisionero, convenciendo a su padre para que lo deje a su cargo y así cumplir las órdenes que le son ineludibles por medio de un lazo de sangre, plasmado en un collar y un anillo que contienen su “sangre inocente”, que es lo que lo somete de forma mágica y misteriosa…
Criada escuchando cuentos de romance, nobleza y fantasía, Annabelle será incapaz de torturar al vampiro para mantenerlo débil y sumiso. Al contrario, algo hay en él que la inquieta cada vez que su mirada se cruza con el gris intenso y maravillosamente hermoso de sus ojos, surgiendo entre ambos una irrefrenable atracción y profundos sentimientos que serán puestos a prueba a cada instante, con ingredientes de intriga, secretos, traiciones, sacrificio y un amor apasionado, pleno de entrega y erotismo, que hará el deleite de los lectores de principio a fin.

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